Hace año y medio presentamos al Ajuntament de Barcelona una extraña campaña de publicidad que consistía en la creación de una cápsula de tiempo en la que podrían guardarse los mensajes de los barceloneses imaginando el futuro.
En nuestro plan más ambicioso y utópico, proponíamos que el proyecto no se quedara en una cápsula virtual en la web, sino que se construyera físicamente y se colocara en un lugar importante de la ciudad.
Hoy, más que nunca, podemos decir que el plan se va a cumplir al milímetro.
Esta mañana La Cápsula del Tiempo barcelona2159 ha madrugado desde los talleres en los que se ha construido para llegar a su ubicación definitiva en CosmoCaixa Barcelona.
Escondida aún tras celofán, sus 750 kilos se han posado delicadamente sobre su base definitiva en el centro del estanque. Allí permanecerá como contenedor de mensajes, sueños, ilusiones, críticas, avisos y sonrisas para el futuro.
Mañana a las 12:00h del mediodía, con la mano del señor alcalde, La Cápsula del Tiempo barcelona2159 se cerrará definitivamente para abrirse en el año 2159.
La utopía no es una tontería.
Queda demostrado.
¿No os parece la escena muy japonesa con minifurgoneta de colorines incluida?
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