Seis meses después, el neón de la exposición "Low Cost" en la que participamos en julio del año pasado vuelve a funcionar, esta vez en La Casa.
De la exposición lo enviamos directamente a arreglar porque la empresa que lo hizo no había cubierto los filos de cobre por donde pasaba la alta tensión y cualquiera se podía quedar pegado.
Después, tras traerlo a La Casa con mimo y esmero, el neón no funcionaba. Y al intentar ver si era cosa de algún cable suelto, a Carlitos de le rompieron tres letras.
Volvimos a enviar el neón a arreglar, respetando lo que el azar quiso que se rompiera (las letras "COM" de "ACOMPAÑE").
Aún así, y de nuevo en La Casa, por otros dos meses el dichoso neón siguió sin funcionar.
Finalmente, esta mañana han pasado a "arreglarlo" (era cosa de un cable de enchufe que tenían mal puesto, aunque no lo reconocen y con malas maneras nos han cobrado por ello; si queréis hacer un neón, preguntadnos dónde no hacerlo).
Whatever.
Estamos contentos de tener en La Casa el neón cuyo texto el ¿azar? quiso mejorar.
¡QUE LA SUERTE TE APAÑE!
AVISO A LOS VISITANTES: permanecer mucho tiempo en la sala produce efectos daltonizantes, haciendo que durante un rato lo veas todo azul verdoso. Lo llamaremos "el efecto mediterráneo". Puro arte.
Mucho mejor así, sin dudarlo.
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